El aprendizaje en línea es cada vez más popular con cada año que pasa. Muchos prefieren los cursos en línea por su comodidad, mientras que otros señalan los retos que plantea el aprendizaje interactivo y comprometido. Lee este post que hemos preparado para ti hasta el final y descubre cómo diseñar un curso en línea.
Los cursos en línea son muy populares en la actualidad. Si tienes una habilidad puedes enseñar a los demás y ganar dinero por ello. Lo mejor de todo esto es que cuando grabas el curso solo lo haces una vez.
Cómo diseñar un curso en línea
Antes de empezar a diseñar tu curso, es importante que reconozcas las diferencias que harán que los planes de lecciones originalmente diseñados para una clase presencial no se ajusten bien a tu clase en línea.
Si te centras en la facilidad de uso y hace hincapié en las actividades interactivas, puede adaptar esos planes de lección de forma más eficaz o incluso diseñar tu propio plan de lección en línea desde cero.
Bien, veamos ahora los pasos que debes seguir para que aprendas cómo diseñar un curso en línea:
1. Desarrollar su contenido
Los primero que debes saber cómo va a estar guiado el curso. En cuanto a cómo diseñar un curso en línea de forma correcta, este es un aspecto fundamental ya que todo estará en orden y el aprendizaje va a ser fluido.
1- Investiga cómo otros han impartido cursos similares.
No hay nada malo en tomar prestado o remezclar el material que otros profesores han utilizado para cursos similares. Puedes ahorrarte mucho tiempo y maximizar la calidad de tus contenidos leyendo otros planes de estudio y adaptándolos a tu clase. Utiliza tu motor de búsqueda preferido para encontrar esquemas de cursos disponibles o pregunta a otros profesores que conozcas que hayan impartido el curso.
2- Comienza con un esquema del material.
Con los cursos en línea, será más difícil controlar el flujo de información, ya que los estudiantes pueden elegir cuánto tiempo dedicar a una sesión determinada y qué orden seguir. Por ello, es especialmente importante que tu contenido esté organizado de forma coherente y con un propósito. Divide la materia principal en unidades o módulos principales y crea otras subdivisiones que guíen a los estudiantes a través del contenido.
3- Determina los objetivos de aprendizaje.
Decide qué quiere que los estudiantes obtengan del curso en su conjunto y de cada unidad individual. Estos resultados deben ser declarados explícitamente a los estudiantes y guiar el desarrollo del contenido.
4- Utiliza un texto profesional.
Encuentra un libro de texto profesional que cubra tu tema. Utiliza el índice de contenidos como guía para la descripción del material y el desarrollo del contenido específico.
5- Entiende tu Sistema de Gestión de Aprendizaje.
Un Sistema de Gestión de Aprendizaje (LMS) es el software que tú y sus estudiantes utilizarán para navegar por el curso. Cada LMS tiene características únicas y entender sus fortalezas y debilidades te guiará en términos de qué tipos de contenido puedes o debes usar.
Los LMS más populares son:
Si tienes algunas habilidades de desarrollo de software, puedes considerar un LMS de código abierto. Estos programas son gratuitos y te permitirán cambiar manualmente aspectos del código para adaptar el LMS a tus preferencias. El inconveniente es que no suelen contar con un servicio de atención al cliente.
Habla con los administradores de tu escuela, instituto o universidad. La mayoría de las escuelas tienen un contrato con un proveedor de LMS específico o simplemente te darán una sugerencia preferida. Si tienes que elegir el tuyo, pregunta a otros profesores qué prefieren.
2. Fomenta el aprendizaje interactivo
Un aprendizaje interactivo es excelente para que tu curso sea poco aburrido y más emocionante. Es bueno que utilices herramientas y una excelente metodología para fomentar el aprendizaje interactivo.
1- Crea tableros de mensajes.
Una de las limitaciones más significativas del aprendizaje en línea es que los estudiantes no pueden interactuar contigo o entre sí tan directamente. Si no incluyes un aspecto interactivo en el curso, la educación que reciben los estudiantes será poco mejor que si simplemente compraran un libro de texto y lo leyeran por su cuenta.
Los tablones de anuncios son una característica disponible en todos los principales LMS y te permitirán enseñar en la tradición socrática, donde los estudiantes debaten, hacen preguntas y ofrecen reflexiones personales sobre el contenido.
2- Divide a los estudiantes en grupos de discusión.
Algunos cursos en línea, especialmente los MOOC (Massive Open Online Course), tendrán cientos de participantes que harán que los debates sean onerosos. Asigna a los estudiantes en grupos de no más de 20 miembros. Esto facilitará discusiones más efectivas en el tablero de mensajes.
3- No confíes demasiado en los exámenes.
Una política de libro cerrado puede ser difícil o imposible de aplicar en los cursos en línea y los exámenes a libro abierto harán poco para comprobar la retención de conocimientos. Dé prioridad a las tareas escritas, especialmente a las que implican un debate crítico en sus tablones de anuncios, sobre los exámenes de opción múltiple.
4- Organiza sesiones de preguntas y respuestas en directo.
Una buena manera de establecer una conexión personal con tus estudiantes es organizar una sesión de vídeo en directo en la que los estudiantes puedan hacer preguntas y tú puedas responder en tiempo real. Muchos LMS ofrecen una función de vídeo en directo, pero si no está disponible, puedes invitar a los estudiantes a un Google Hangout o a una sesión de Skype.
3. Asegura la facilidad de uso
Un aspecto importante acerca de cómo diseñar un curso en línea es la facilidad de las funciones y herramientas en el curso. Es por ello que debes hacer que el curso sea fluido y bien pensado.
1- Crea un vídeo introductorio.
Para establecer una conexión personal con tus alumnos, crea un breve vídeo introductorio. Incluye una introducción personal y explica tu experiencia en la materia para crear un espíritu.
También querrás proporcionar una visión general del material del curso, incluyendo los resultados de aprendizaje esperados, el material específico que se cubrirá y una lista de las principales tareas.
2- Haz que tu contenido sea consultable.
Aunque es bueno animar a los estudiantes a utilizar el esquema para guiarse a través del curso, una función de búsqueda es fundamental para permitirles retroceder fácilmente en el material y recordar las lecciones anteriores. La mayoría de los LMS tienen funciones de búsqueda fácilmente disponibles, pero es una buena idea asegurarse de que el contenido se puede buscar y modificar algunos ajustes si es necesario.
3- Utiliza formatos de documentos accesibles.
Es posible que los estudiantes no dispongan de ciertos programas de visualización de documentos o que sus ordenadores tengan capacidades limitadas para ver ciertos lenguajes de codificación frontales. Para evitar problemas, guarda todos los documentos en formato Word o PDF y, si modificas el lenguaje de codificación, déjelo en HTML. Así te asegurarás de que todo el mundo pueda ver tus documentos y páginas de forma gratuita.
4- Ten planes de respaldo para las dificultades técnicas.
Los fallos y las interrupciones temporales son básicamente inevitables cuando se utiliza un software en línea complejo como un LMS. Cuando ocurren, es probable que te veas inundado de correos electrónicos de estudiantes enfadados y confusos, especialmente si se produce un problema técnico antes de una fecha límite o un examen.
5- Incorpora tecnologías de apoyo.
Algunos estudiantes tienen discapacidades auditivas, visuales, de aprendizaje o de otro tipo que les dificultan las tecnologías en línea. La mayoría de los sistemas LMS ofrecen adaptaciones, como lectores en voz alta o ampliación del texto para los discapacitados visuales.
6- Realiza un ensayo.
Es importante realizar un simulacro del curso en el sitio web antes de que comience la clase. Esto es especialmente importante si estás creando una cantidad significativa de contenido nuevo. Concéntrate en la fluidez del material, en la facilidad de acceso a los diferentes módulos y comprueba si hay errores.